domingo, 26 de abril de 2009

Décima semana: el patrón oro

Durante la semana del 13 al 17 de abril se ha trabajado en clase el tema de el sistema internacional de pagos; el patrón oro.

El incremento de la actividad económica y de los intercambios no habría sido posible sin un aumento correlativo de la oferta monetaria y de los medios de pago. Ello fue posible gracias a la movilización del ahorro a través de la banca, a los descubrimientos de nuevos yacimientos de oro y plata y a la difusión del dinero bancario, conocido anteriormente, pero que hasta el siglo XIX se había utilizado poco.
Los pagos a larga distancia continuaron efectuándose mediante letras de cambio. La letra de cambio era conocida desde la Edad Media pero su uso se amplio y perfeccionó para facilitar al mismo tiempo el crédito y los pagos a escala mundial. La culminación de estas mejoras en los medios de pago fue el sistema internacional de pagos de patrón oro, considerado en la época como la causa del buen funcionamiento de la economía mundial, aunque sólo era el resultado de éste. El patrón oro era un sistema de paridades fijas que establecía el valor de la moneda respecto el oro. La primera potencia que lo estableció fue Gran Bretaña. En 1914 fijó el valor de la libra según el patrón oro debido a que en ese momento Portugal descubrió minas de oro en su colonia de Brasil y como entre ellos existía un tratado que les beneficiaba Inglaterra tenía el control de ese oro. A partir de entonces los demás países establecieron el Patrón oro. Este echo se convirtió en la primera globalización del sistema monetario.
Finalmente, el patrón oro entraría en crisis a causa de su dependencia del liderazgo británico y acabará con la primera Guerra Mundial.
En la actualidad, utilizamos el dinero bancario pero no se necesitan reservas de oro y plata para cubrir toda la oferta monetaria existente ya que la sociedad confia en este. Si lo relacionamos con el petróleo, en esa época Gran Bretaña tenia el dominio de los mercados, y en cambio ahora los países que tienen el poder son aquellos que tienen reservas de petróleo.
En mi opinión, creo que el patrón oro fue un sistema necesario en un momento en que la industrialización movía muchas cantidades de dinero y por eso la sociedad veía necesaria la introducción de un nuevo sistema de pago, ya que los métodos tradicionales comenzaban a ser insuficientes.
Aquí adjunto una noticia que trata sobre un estudio que demuestra que con el patrón oro España habría recibido más inversión extranjera, lo que le hubiese permitido renovar y modernizar su estructura productiva:

sábado, 18 de abril de 2009

Novena semana: el surgimiento de la economía internacional


A lo largo de la semana del 30/03 al 03/04 se ha tratado el surgimiento de la economía internacional y la política comercial en el siglo XIX. Se ha profundizado en las políticas comerciales existentes en la época, la composición y las bases del comercio exterior y los movimientos internacionales de los factores de producción.
La Revolución Industrial, junto con la revolución de los transportes supuso cambios importantes en la disponibilidad de los productos y de factores de producción, hasta el punto de producir cambios en el conjunto de la economía mientras que las economías preindustriales eran economías en las que el comercio era secundario, la finalidad de las economías surgidas después de la Revolución Industrial producían para vender y eso implicaba hacerse dependientes del comercio, tanto interior como internacional.Se produjo un aumento de producción y un crecimiento del comercio mundial basado en el intercambio de manufacturas por materias primas y alimentos, beneficiando la estabilidad de los productos primarios mundiales. Este librecambio se vió afectado en la segunda mitad del siglo XIX, ya que aparecieron nuevos competidores a los cuales no les favorecía este sistema. Por este motivo estos países recurrieron al proteccionismo -aranceles a los productos importados, etc., y esto supuso un avance en el librecambio representado por la disminución de barreras arancelarias.

Hay que destacar que a lo largo del siglo XIX se registró la oleada más grande de la emigración. Los movimientos migratorios se iniciaron en Inglaterra, aunque ésta hubiese sido una gran potencia industrial, y fue por varios motivos: factores ideológicos, motivos de persecución étnica, etc. Italia también fue protagonista por las grandes oleadas migratorias, aunque lo sufrió más tarde porque se industrializó posteriormente.
Después de la sintesis este tema, podemos observar la importancia que adquirieron algunos países como Gran Bretaña en la época industrial.
En la actualidad, un elemento a destacar es que los movimientos migratorios se dan a la inversa; en el siglo XIX los países a los que mas se inmigraba eran aquellos donde había menos presión demográfica. En cambio, hoy en día la gente de los países subdesenvolupados es la que se dirige a los países desenvolupados en la búsqueda de una mejor condición de vida, aunque teniendo en cuenta la situación económica actual ni siquiera España es un buen país donde empezar una nueva vida por falta de trabajo.

sábado, 11 de abril de 2009

Octava semana: La evolución de las Nuevas Europas

Durante la semana del 23 al 27 de marzo hemos analizado básicamente la evolución de las Nuevas Europas.
La demanda de materias primas y la plétora de población en Europa propiciaron que los europeos ocuparan las zonas templadas del mundo, donde era posible disponer de tierra en abundancia y reproducir las formas de producción y de vida europeas.
Las Nuevas Europeas más características son Canadá, Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda. Se trata de colonias británicas con predominio de población metropolitana, que disponía del poder político y económico en el territorio, mientras que la anterior población indígena era rechazada hacia el interior o aniquilada. Estos países disponían de grandes extensiones de territorio, y en algunos casos de importantes riquezas mineras. La elevada productividad generó una renta per cápita alta, próxima y en algunos casos pareja a la de los países industrializados, y con salarios elevados, efecto tanto de la productividad como de una política de restricción de la emigración.
La materias primas obtenidas en cada uno de estos países son diferentes como también su ritmo de crecimiento. Sus características comunes son: gran volatilidad de los negocios, muy afectados por crisis financieras y una rápida capacidad de adaptación a productos nuevos. Canadá era especialmente un gran exportador de pieles y madera, Sudáfrica su crecimiento recae en la riqueza minera, Australia fue y es el principal productor mundial de lana, y en Nueva Zelanda su crecimiento recae en la industria y el transporte frigoríficos.
La dotación de recursos naturales, grandes extensiones de terrenos, etc, fue lo que propicio la colonización de las Nuevas Europas ya que para que la economía de los países se extienda son necesarios los recursos. En la actualidad, vemos como las grandes empresas se dirigen a países como Sudáfrica donde encuentran los recursos necesarios para producir ya que aquí son escasos.
Hay que destacar la conferencia de Berlín en la que fueron representadas las potencias occidentales con el objetivo de resolver la repartición de la cual sólo conservaron su independencia Liberia y Etiopía. Este reparto da a entender los conflictos que ha habido en África a lo largo del último siglo.